Hasta nuestra redacción ha llegado, en más de una ocasión, denuncias que, además de los llamados carrretilleros que se dedican a sacar la basura de los barrios, incluso, por donde regularmente pasan los camiones para tirarla en puntos específicos de la ciudad, habian personas que buscaban colocarla en lugares específicos y filmarlas para crear campañas en las redes.
Hace poco, un conocido comunicador nos comentaba que le resultó curioso la forma en que con el entorno limpio, aparecían focos de basura en medio de la avenida San Vicente de Paul, en horas pico, justo después de haber pasado el camión pero en puntos muy visibles y no fué hasta ayer que se sorprendió, por desgracia, sin filmicas, a una persona guiando y pagando a carretilleros no eventuales para colocar basura en esos puntos, persona esta, ligada a posibles intereses políticos.
Se supo además, que el día 17 de este mes, Febrero 2021 la Alcaldía de Santo Domingo Este canceló a un empleado por aupar la recogida de basura pero él mismo provocando el vertedero con tal de crear campañas denostativas contra la institución.
Es claro que la ineficiecia en la recogida de basura existe, que en la Circunscripción 1 y en la 3 la Alcaldía poco puede hacer porque esta se encuentra en manos de empresas privadas pero en la 2, es su responsabilidad y es un camino que más allá de los esfuerzos recibe críticas justas. también es cierto que poco a poco hay que ir acabando con los carretilleros que no permiten que se limpien los focos y concientizar a la población sobre las rutas y frecuencias de la recogida junto al cumplimiento de ellas.
Pero eso es un tema, pero de ahi, a que personas estén alentando, pagando, para depositar basura con tal de desprestigiar a la gestión no deben ser aplaudidas ni incluso, por los adversarios políticos. Ello debe ser cuestonado y debidamente sancionados como mande la ley.
Que sirva la denuncia para que las autoridades estén alertas, sobre todo lso vecinos de nuestra ciudad que son los afectados por el uso politiquero de un tema sanitario.
